Nara

martes, 16 de junio de 2009

A Nara de excursión! Día de templos.

No sé cómo nos las apañamos, pero de camino al parque dónde están la
mayoría de cosas que ver, otra señora mayor nos cogió por banda y nos
hizo de guía por un rato, esta vez, por suerte para mí, los idiomas
eran inglés y japonés. Nos enseñó las tiendas de pinceles, la tuvimos
que esperar para que sacase dinero del cajero y casi nos lleva a hacer
la compra, menos mal que supimos escabullirnos amablemente a tiempo
cuando comenzó a hablar con otra gente que se encontró en la calle.

El sitio es una maravilla, los templos están rodeados por todas partes
de naturaleza y en algunas partes se podía sentir la paz y la
tranquilidad. Pero en general, todo el lugar estaba lleno, como casi
todas partes, de un montón de escolares de excursión que nos saludaban
uno por uno, además de los ciervos y los templos, nosotros debíamos
ser la otra gran atracción. Y es que en Nara, siglos atrás, los
ciervos eran sagrados y no se podían cazar, ahora están protegidos
porque son considerados tesoro nacional y campan a sus anchas por
todas partes. Alimentados por las galletas que los turistas pueden
compara para ellos en cada esquina, no le tienen miedo a nadie y en
cuanto atisban una migaja se acercan interesados en manada, y cuidado
con no darles, que si no te cornean te muerden el culo, LITERAL!
experiencia propia (en cuanto la censura china me deje entrar
directamente en blogger o yo deje el país, subo fotos para que lo
veais). Eso sí, en cuanto los cebas y ven que no tienes más comida, se
vuelven mansos y se dejan manosear… no sabía que los cuernos estaban
calientes y recubiertos de un pelillo cortito muy suave y pegajosillo…

Dentro del templo de Tōdai-ji hay, cómo no, un Buda daibutsu, el Buda
Vairocana, en japonés llamado Dainichi, que significa "Buda que brilla
a lo largo del mundo como el sol", la cosa curiosa es que en la parte
de detrás del templo, hay un agujero en una de las columnas a la
altura del suelo, dicen que es tan grande como uno de los agujeros de
la nariz del Buda, y que si consigues pasar por él alcanzarás el
estado de Iluminación, aunque nosotros ya sabíamos que estamos
bastante iluminados (sobre todo últimamente), probamos, cómo no, y
pasamos, alguna con más problemas que otro… ejem… A raíz de esto, en
este mes de viaje (escribo el blog con algo de retraso) hemos perdido
algo de peso, yo 7 kilos, que no me venía mal, y Sebastian 4, a ver si
conseguimos que su estómago se asiente un poco, que si no dentro de
poco voy a tener la sensación de estar viajando sola porque no se le
va a ver…

2 comentarios:

tcb dijo...

De esta ya no se os resisten ni las piedras. Dicen que dijo Nietzsche "lo que no nos mata, nos hace más fuertes". Ánimo campeones. Mum.

Álvaro dijo...

comed sushi sin parar